Casablanca, conocida como la perla de Marruecos, es una ciudad que cautiva a sus visitantes con un encantador choque entre lo moderno y lo tradicional. A lo largo de esta guía de cinco días, te llevaremos a explorar los tesoros arquitectónicos, los vibrantes mercados y las serenas playas que hacen de Casablanca un destino fascinante.
Comienza tu aventura en la impresionante Mezquita Hassan II, una de las más grandes y hermosas del mundo. Dedica la mañana a admirar su minarete, que se eleva a 210 metros, y explora el interior, donde hasta 25,000 fieles pueden reunirse. La mezquita se extiende parcialmente sobre el agua, lo que le añade una dimensión mágica a su arquitectura.
El segundo día está dedicado a los coloridos y bulliciosos mercados de Casablanca. Visita el Mercado Central para probar algunos de los frescos productos locales. No te pierdas el Mercado de Derb Ghallef, el lugar perfecto para encontrar todo tipo de curiosidades y artesanías marroquíes.
Explora el único museo judío en el mundo árabe, el Museo Judío de Casablanca, donde aprenderás sobre la historia de la comunidad judía en Marruecos. Por la tarde, visita el Palacio Real de Casablanca, aunque su interior no está abierto al público, los impresionantes jardines y la arquitectura exterior son dignos de admiración.
Dedica un día a la relajación en las playas de Ain Diab y pasea por la Corniche, una avenida junto al mar llena de cafés y tiendas. Disfruta de un café mientras observas el atardecer, un momento perfecto para reflexionar sobre tu viaje.
En tu último día, visita el distrito de Habous, conocido por su arquitectura inspirada en la medina tradicional y sus numerosas galerías de arte. No olvides disfrutar de un auténtico tajine o couscous en uno de los restaurantes locales antes de decir adiós a Casablanca.
